CGE

Programa Provincial de

Educación y Seguridad Vial

Programa Provincial de Educación y Seguridad Vial - Institucional

En el Programa de Educación Vial, Aprobado por resolución 0958/11, iniciado en el 2011 por Consejo General de Educación, promovemos la “Movilidad Segura para todos/as”. Fortaleciendo la enseñanza de la educación vial en las instituciones educativas de modo transversal con todos los niveles y modalidades. Con el propósito de brindar respuestas a esta demanda social, desde la función específica de la escuela, se incluyen conocimientos éticos, normativos, jurídicos, psicológicos y biológicos.

Por otra parte, la educación vial ha de ser entendida como un aspecto más del aprendizaje de los comportamientos regulados por las normas éticas. Es un proceso educativo integral y permanente que tiene como propósito formar a las personas para el uso adecuado, responsable y solidario del espacio público.
Si consideramos a la escuela como referente para la adquisición de aprendizajes sociales y culturales, ella se constituye en el espacio propicio para concientizar a las diferentes generaciones respecto de esta problemática.

Caminar por la vereda, cruzar la calle, mirar los carteles indicadores, interpretar las señales mientras estamos en una ruta o tomar un colectivo, por ejemplo, son rutinas que forman parte de la vida cotidiana de un gran número de personas. Día tras día, muchos de nosotros hacemos estas cosas y pocas veces advertimos que, aunque las hayamos asumido con naturalidad, forman parte de la intensa toma de decisiones que desarrollamos las personas viviendo en sociedad. Nos movemos en un espacio que es social. Nuestro transitar ocurre en un tiempo y un espacio en el que también se mueven otros y nuestro andar influye en el desplazamiento de los demás ciudadanos.

¿Por qué enseñar educación vial?
Así como el estado es el encargado de diseñar un sistema de tránsito y de circulación eficiente y seguro, de garantizar las condiciones mínimas de movilidad, y de ejercer el control y la sanción en los casos de incumplimiento de la normativa que regula dicha circulación, creemos que también es responsabilidad del estado promover e impulsar una nueva cultura vial a partir del sistema educativo, que apunte a mejorar la calidad de vida de todos los ciudadanos. Esto implica asumir de manera central la tarea de formar a los ciudadanos en aquellos conocimientos, actitudes y valores que son esenciales para la toma de conciencia individual, la comprensión de la importancia de asumir un cambio de conducta que permita prevenir los siniestros viales y reflexionar sobre las causas que provocan los altos índices de siniestralidad.

El tránsito es una actividad en la que intervienen múltiples actores, con intereses, necesidades y posibilidad de movimiento diversa, por lo que no es suficiente una ley que regule el tránsito y la movilidad para producir ese cambio de cultura que mencionamos más arriba (que implica la modificación de prácticas, pautas de
conducta, sentido común vial). Se trata de un replanteo del espacio público asumiendo que el mismo es producido cotidianamente en el marco del ejercicio ciudadano.

Talleres – asistencias técnicas territoriales y virtuales
Esta estrategia de trabajo colaborativo se caracteriza porque, desde una perspectiva problemática y no temática, articula diferentes posibilidades disciplinares en un ámbito de reflexión y acción desde un ejercicio multidisciplinario en el cual es posible vincular el conocimiento de las diferentes áreas con el contexto de los participantes, teniendo en cuenta sus experiencias y conocimientos.
La articulación entre los saberes disciplinares, los preconceptos de los estudiantes y la práctica se convierte en un elemento que a partir del análisis favorece la generación de hipótesis en relación con el problema abordado en el taller, a fin de alcanzar un nivel comprensivo del problema y posibles vías de implicación en su solución. Los talleres, por el diálogo que se propicia en ellos, son un medio adecuado para contrastar comportamientos y conductas en el tráfico. Es por ello que al utilizar esta alternativa metodológica la comprensión sobre el comportamiento ante un riesgo y su incidencia sobre la seguridad, o el planteamiento de dilemas morales con respecto a la valoración propia que se hace de la seguridad, el respeto a las normas y la vulnerabilidad, son temas de mucha relevancia porque permiten sacar conclusiones concertadas.

Estos planteamientos permiten realizar un trabajo de campo en el que se pueden hacer recorridos para analizar las condiciones de movilidad y uso que se hacen del espacio público, que permiten involucrar a los estudiantes, docentes, familias y a la comunidad en torno a un proyecto de ordenamiento a través de la movilidad y de las vías alrededor del establecimiento educativo.

Objetivos
Contribuir al desarrollo de actitudes y valores de los estudiantes en torno a la seguridad vial, mejorando su movilidad y siendo la escuela un espacio seguro en donde trasladarse. A través de un trabajo articulado con todas las direcciones de nivel y modalidades.

Facilitar estrategias para transversalizar la educación vial a través de asistencias técnicas presenciales y virtuales con docentes y futuros docentes, logrando una promoción de la cultura vial para la vida mejorando la formulación y el desarrollo de proyectos para la prevención de siniestros viales.

Brindar materiales de apoyo pedagógico para la comunidad educativa que colaboren al inicio en el aprendizaje de actitudes, valores y comportamientos que permitan a los estudiantes desenvolverse en la cotidianidad como ciudadanos capaces de ejercer sus derechos y obligaciones en la vía pública.

Acompañar a la escuela en su función como promotora de trabajo conjunto con otras instituciones de la comunidad educativa, integradas por los estudiantes, docentes, no docentes y las familias.

Fortalecer el trabajo interministerial con el Ministerio de Gobierno de Entre Ríos y la Agencia Nacional de Seguridad Vial, para la promoción y concientización con el objetivo de lograr conductas de movilidad más seguras y hábitos responsables en la comunidad.

  • Líneas de acción:
    Talleres para estudiantes de todos los niveles y modalidades.
  • Asistencias técnicas, talleres en territorio y virtuales para docentes, futuros docentes, equipo directivo, personal no docente, supervisores.
  • Material de apoyo pedagógico, folletos, trípticos, gigantografías para toda la comunidad educativa.
  • Jornadas de Educación y Vial para la comunidad con el Observatorio de Seguridad Vial Provincial.
  • Mesas de trabajo de intercambio y asistencias técnicas con Municipalidad, Juntas de Gobierno Provincial, entidades nacionales y provinciales abocadas a la problemática vial.
  • Ateneos: articulación con las distintas temáticas curriculares.